El Palladium Can Misses se estrenó en esta segunda vuelta con victoria. El Ibiza se impuso con claridad al Alcoyano con un marcador de 3-0 con goles de Obolskii, Gallar y Soko. Los de Romo vuelven a la senda de la victoria tras el empate en Madrid y refuerzan su confianza con un partido muy completo.
El partido arrancó con un Ibiza volcado por banda izquierda. El primer tanto no se hizo esperar demasiado. En el minuto 6, Alex Gallar recibió un pase interior en el lateral del área. El 14 celeste dio un pase de la muerte para que Obolskii, en boca de gol, tan solo tuviera que empujar la pelota a la red. El Ibiza metió la primera clara que tuvo, lo que demostraba lo enchufado que salió el equipo balear.
Cerca del minuto 20, Javi Jimenez tuvo una muy clara al plantarse delante del portero tras haberle pillado la espalda a la defensa del Alcoyano. Sin embargo, el último toque se le fue demasiado largo y llegó un poco forzado al remate, por lo que no pudo colocar demasiado el disparo y el guardameta acertó a la hora de despejar el balón.
A partir de ese momento, el Alcoyano cerró filas y fue más complicado generar ocasiones de peligro. Hubo alguna llegada celeste más antes del descanso, pero sin demasiado peligro. La más clara fue la última de la primera parte. Soko se marchó en velocidad del defensor y puso un gran centro paralelo a la línea de gol. Javi Jiménez estuvo a punto de rematar ese balón, pero su marca estuvo muy encima y le impidió llegar a tiempo a esa pelota.
La segunda mitad arrancó con un Ibiza más ofensivo, acechando el área visitante cada vez con más frecuencia. Apenas 10 minutos tardó el equipo isleño en anotar otro tanto, esta vez desde los once metros. Gallar no perdonó y fusilo la portería de Valens, engañando por completo al guardameta del Alcoyano.
Prácticamente en la siguiente jugada el Ibiza hacía el tercero. Gallar metía un gran pase a Soko, quien se internó hasta el área pequeña para después colocar el balón a un lado de un portero que poco o nada pudo hacer para detener el disparo.
El Ibiza se gustaba y se sentía muy cómodo en el campo. No concedía ocasiones y generaba bastante peligro, llegando al área rival en pocos toques. Los cambios que introdujo Romo sirvieron para dar descanso a jugadores con muchos minutos en las pierdas y para dar la oportunidad a aquellos que no habían disfrutado de muchas durante la temporada.
El encuentro finalizó con este 3-0. Un Ibiza muy sólido, capaz de ser expeditivo en defensa y eficaz en ataque.
El próximo encuentro será en un feudo complicado como es el del Intercity, único equipo capaz de batir a la escuadra ibicenca en Liga esta temporada. A partir de las 12:00 del domingo 28 de enero en el Antonio Solana de Alicante.