¡Ibiza no se rinde!

¡El Ibiza no se rinde! Tras muchas semanas de trabajo no recompensado y de ver un Ibiza no demasiado acertado en su conjunto, los celestes volvieron a sumar de tres al imponerse 4-3 a un correoso Melilla que planteó un partido encerrado atrás y que supo aprovechar a la perfección las pocas ocasiones que generó.  El equipo remontó un partido que se puso cuesta arriba en varias ocasiones. Soko, Obolskii, Gallar y Arroyo pusieron los goles de un Ibiza que sudó sangre para conseguir la victoria. Este equipo no está muerto, está muy vivo. 

El elenco de futbolistas escogidos por Romo para iniciar el partido empezaron enchufadísimos. El primer susto tardó poco más de tres minutos en llegar, con un disparo de Javi Jiménez desde dentro del área que pudo despejar bien la defensa visitante. 

El Melilla planteó una férrea linea defensiva que parecía inexpugnable. Aun así, con el paso de los minutos, los acercamientos locales iban siendo cada vez más peligrosos. Una de las más claras fue un remate de Obolskii que pegó en el larguero, además de un remate de cabeza de Soko un minuto antes que sacó la defensa bajo palos. 

El gol llegó, por fin, antes de cumplirse la media hora de juego. Gallar ponía un centro chut a portería y el rebote le caía a un Soko que, a pesar de estar rodeado por varios defensores, pudo conectar con el balón, alojándolo en el fondo de la red.

La alegría en Can Misses duró apenas 15 segundos. Tras el saque de centro, el Melilla envió un balón largo al área y Siddiki fue objeto de penalti. El propio Siddiki tomó la responsabilidad y no falló. Demasiado premio para un equipo que apenas había llegado un par de veces al área de Sequeira hasta ese momento. 

Los de Romo siguieron intentándolo de todas las maneras. El balón pasaba gran parte del tiempo en el campo del Melilla, muy cerca de su área. Al Ibiza le faltaba, quizás, un poco más de fluidez en el juego. A pesar de ello, se lograba pisar el área de José Salcedo con bastante frecuencia. Gallar tuvo una gran ocasión poco antes del minuto 35. Su disparo lo desvió el portero visitante rozándo el cuero con los dedos y evitando el segundo gol balear. 

Sin embargo, Can Misses quedó enmudecido al filo del descanso  con el segundo gol del Melilla. Tras una pérdida de balón en el medio del campo del Ibiza, de nuevo Siddiki anotó para los de la Ciudad Autónoma tras recibir un balón en la frontal del área. El delantero, libre de marca, ejecutó un gran disparo que batió por abajo a Sequeira. 

La réplica del Ibiza llegó en la posterior jugada con un remate de Obolskii que se marchó por encima del larguero. 

Con el 1-2 nos marchamos a vestuarios

SEGUNDA PARTE DE REMONTADA

La segunda parte se antojaba complicada, ya que el Ibiza se iba a encontrar a un Melilla aún más encerrado atrás y con la única idea de aprovechar alguna contra. Romo echó toda la carne en el asador metiendo a Rubén y Monju en el descanso y a Sulei diez minutos después. 

El Ibiza, muy superior en esta segunda parte, tenía el control absoluto de la pelota. 

En uno de los muchos ataques celestes llegaría el empate. Obolskii igualó la contienda en el 60 con un buen remate cruzado que vino tras un pase filtrado de Soko que dejó al ruso en una gran posición para el remate. Un merecido -pero corto- premio visto lo visto en el partido hasta el momento. 

Pocos minutos después el Ibiza tuvo una doble ocasión clarísima. Rubén disparó en primera instancia, el portero repelió el balón y el rechace le cayó a un Sulei cuyo disparo pegó en un defensa. La pelota acabaría en saque de esquina.

La energía del Ibiza no decayó y las ocasiones isleñas seguían siendo frecuentes, contabilizandose casi a una por minuto. En el minuto 68 Sulei tuvo una clamorosa que no acabó en gol Dios sabe por qué. El 7 celeste estaba dentro del área pequeña y recibió un gran pase de Obolskii desde la linea de fondo. Sulei tenía todo de cara para anotar, pero su disparo se marchó muy arriba. 

Inverosímil. Cuando mejor estaba el Ibiza llegó el tercero del Melilla, de nuevo a la contra. Siddiki luchó contra viento y marea para llevar el balón hasta el área del Ibiza. Tras una buena apertura a banda izquierda y un gran centro al corazón del área, Jose Enrique empujó el balón a la red y dejó incrédulos a buena parte de los aficionados congregados en el estadio, ya que el Ibiza estaba siendo superior en juego y en sensaciones. 

A pesar del duro golpe, el Ibiza no perdió la fe. A falta de diez para el final Gallar volvía a igualar el partido. El catalán disparó con precisión un balón centrado por Sulei y ponía el 3-3 en el marcador. El propio Gallar había tenido minutos antes una clarísima a balón parado, pero su disparo lo desvió Salcedo primero y el larguero después. 

Y cuando parecía que estaba todo perdido, llegó el gol de la remontada. Suleiman Cámara se zafó de hasta dos defensores en banda izquierda. Su centro lo remató con el alma Arroyo, que apenas llevaba 5 minutos sobre el verde, y levantó de golpe a todo el Palladium Can Misses. Un merecidísimo gol que premió el esfuerzo de un equipo que se dejó el corazón para conseguir darle la vuelta al partido y que dejó los tres puntos en casa. 

Este equipo no está muerto, está muy vivo. El próximo partido, el derbi frente al Atlético Baleares el domingo 14 de abril a partir de las 12:00 horas.