Unión Deportiva Ibiza y Villarreal B firmaron tablas (0-0) en el Palladium Can Misses. Un punto que no contenta a los chicos de Lucas Alcaraz, ya que estuvieron cerca en varias ocasiones de adelantarse en el marcador, llegando incluso a errar un penalti en la segunda mitad. El partido deja a las claras, además, que se hace muy fácil pitar en este estadio y que expulsar a un jugador celeste es demasiado sencillo. El partido sirvió para demostrar que la afición ibicenca aún no se ha rendido, ya que el Palladium Can Misses presentó la mejor entrada de la temporada y animó al equipo durante los 90 minutos.
El Ibiza encaró el partido con una gran responsabilidad y con una confianza elevada tras el último triunfo en Leganés. El rival, el Villarreal B, se presentó como un equipo valiente que quiso ser protagonista con balón y que puso en aprietos en varias ocasiones a la sólida defensa ibicenca.
Las primeras ocasiones celestes llegaron con sendos disparos de Herrera y Coke, cuyos disparos no terminaron de coger portería y se marcaron por poco.
El mini submarino apretó y tuvo dos seguidas en el minuto 31. Fer Niño primero fue el protagonista de ambas, pero Fuzato primero y la buena actuación defensiva de los defensores después impidieron que llegara el primer gol amarillo.
Con la segunda mitad llegó la jugada crucial del encuentro. Un centor lateral de Escobar al corazón del área desencadenaba una acción polémica con una mano de por medio. El colegiado fue llamado al VAR para revisar la jugada, señalando penalti como resultado. Herrera asumió la responsabilidad. Pero desafortunadamente Iker Álvarez, portero amarillo, adivinó perfectamente el lanzamiento y consiguió evitar el gol celeste. Un penalti fallado que afectó emocionalmente al Ibiza y a Herrera, un jugador ejemplar durante toda la temporada pero que no tuvo suerte en esta ocasión.
Alcaraz decidió introducir varios cambios, entre ellos Julis. Poco aguantó el checo en el terreno de juego, ya que el colegiado le envió al vestuario antes de tiempo por una rigurosa expulsión que ni siquiera revisó el VAR.
Antes del final del partido hubo par de acercamientos más del mini submarino, pero el marcador no se movería gracias a un Fuzato muy seguro en portería.
Una pena no haber sumado de tres, pero el punto sumado es importante para acercarse al objetivo. Desde la UD Ibiza queremos agradecer a todos los aficionados que se animaron a llenar el estadio y que mostraron su apoyo al equipo en todo momento.
El próximo encuentro nos llevará a Andorra el sábado 18 de marzo. A partir de las 14:00, la jornada 32 de LaLiga Smartbank.
